Contar con una moto para desplazarnos por la ciudad puede traer muchos beneficios: esquivamos los molestos embotellamientos y ahorramos una gran cantidad de combustible comparado con un automóvil. Ahora bien, antes de lanzarnos al mercado por una flamante moto, debemos tener en cuenta dos o tres aspectos de gran importancia.
En primer lugar, es necesario tener en cuenta el ciclo de vida de los modelos disponibles, puesto que cada año surgen en el mercado nuevas propuestas y mejoras suculentas que debemos conocer.
El momento más indicado para comprar una moto
Durante el otoño y el invierno, sucede un escenario particular en casi todos los concesionarios de motos del país. Con el fin de liquidar estos vehículos, los vendedores ofrecen rebajas muy interesantes, algo que también toma lugar a finales de cada mes y especialmente en los últimos días del año.
Debes permanecer atento a este tipo de ofertas, sobre todo cuando se avecina un cambio de versión para los modelos existentes. Los almacenes necesitan vender todas las unidades pendientes antes de lanzar el nuevo modelo, por lo que los precios serán más que ideales para nosotros. Además, y si te preocupan las piezas de repuesto, debes conocer que la ley exige a los fabricantes el soporte de piezas de recambio durante al menos siete años.
Esta ley en cuestión, conocida como Ley 7/1996, en su artículo 12.3 estipula que todos los fabricantes o importadores de piezas de recambio deberán ofrecer un servicio postventa por los próximos cinco años, incluso y aunque el modelo sea descontinuado.
El momento menos indicado para comprar una moto
Cuando arriban los meses estivales y durante la primavera, se acostumbra a lanzar los últimos modelos de cada marca. Evidentemente, esto genera una alta demanda en la población, lo que trae como consecuencia una mayor demora en los plazos de entrega, así como precios elevados. Por si fuera poco, y como todo lo nuevo, los modelos recientes no estarán exentos de fallas, y aunque la mayoría de los concesionarios ofrecen el recambio de la moto sin costo alguno, no deja de ser un riesgo que podemos evitar (teniendo en cuenta los desplazamientos al taller, las roturas indeseables y el recelo que despierta adquirir un modelo de sustitución).
Consejos para comprar una moto nueva
Los precios de tarifa para las motos se encuentran disponibles en las webs oficiales de los fabricantes y la prensa especializada. Además, con un poco de suerte podrás negociar con el vendedor y obtener rebajas suculentas.
Del mismo modo nunca dejes de comparar los precios que ofrecen los concesionarios en tu zona, con el fin de obtener la mejor oferta.
También puedes contactar con cada uno de estos concesionarios a través del teléfono para obtener los distintos precios existentes. Cuando te quedes con dos o tres de estos concesionarios comienza a negociar hasta que obtengas un descuento razonable.
No te desesperes. Si aceptas la primera o la segunda oferta no tendrás oportunidades de conseguir un precio más bajo. Tómate tu tiempo, y lo más importante, no te muestres ansioso por comprar. Cuando obtengas un precio adecuado, asegúrate que obtienes el presupuesto por escrito, esto “obligará” al concesionario a no retirarse del acuerdo.
Una vez obtenido el precio deseado, debes entablar una segunda batalla por los “extras” de la moto. Asegúrate de luchar hasta el más mínimo detalle referente al seguro, la financiación y los accesorios como cascos, candados, etc. Puede ser que el plazo de entrega se demore más según el acuerdo pactado, pero ante estos casos realmente vale la pena esperar.
Recuerda que la mejor manera de efectuar una compra es obtener el presupuesto por escrito de varios concesionarios, de modo que puedas comparar tranquilamente la mejor oferta. A su vez, debes tener cuidado con las cláusulas, muchos concesionarios no se responsabilizan con las modificaciones efectuadas por el fabricante antes de la entrega.
